Pasa al Oriente Eterno Óscar Castro, actor y Caballero de la Legión de Honor de Francia

Pie de foto de imagen destacada: Castro (segundo dcha.) recibe la Legión de Honor de manos de la ministra de Francia.
La Gran Logia de Chile expresa sus condolencias a través de un tweet
El actor franco-chileno y Caballero de la Legión de Honor de la República Francesa, Óscar Castro, pasó el domingo 25 de abril al Oriente Eterno, según informó la Gran Logia de Chile a través de un tweet en el que expresa sus condolencias con las siguientes palabras: “Que el recuerdo de su gran obra humanista, su generosidad y su arte permanezca por siempre entre nosotros». Considerado una leyenda del teatro chileno, fue fundador del mítico teatro Aleph.
Hace algo más de dos años, fue galardonado por sus 50 años dedicado al trabajo teatral en Francia y el mundo con el nombramiento de Caballero de la Legión de Honor. El reconocimiento contó con la asistencia de la ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Consuelo Valdés, por su destacada carrera artística de 50 años dedicado al trabajo teatral en Francia y el mundo.

Castro junto al Gran Maestro de la Gran Logia de Chile.

El embajador de Francia en Chile, Roland Dubertrand y el diputado honorario Jean-Claude Lefort, entregaron en la residencia diplomática las insignias de Caballero en la Orden de la Legión de Honor a Oscar Castro, dramaturgo franco-chileno y director del Théâtre Aleph Teatro, por su trayectoria a favor de la difusión del teatro en Francia y Chile.
La Ministra Valdés señaló que Óscar Castro “es una figura muy destacada del teatro chileno y un embajador de la cultura nacional en el extranjero». Dentro de sus actividades en Chile, Óscar Castro se reunió, junto al diputado honorario Jean-Claude Lefort, con el Gran Maestro de la Gran Logia de Chile, Sebastián Jans Pérez, en una distendida cita cordial y fraterna.
La autoridad masónica indicó que “Óscar Castro es un gran valor para el teatro chileno, no solo por su larga trayectoria, sino por su importancia en la fundación de toda una escuela teatral como lo es el Teatro Aleph, del cual fui un espectador en mi adolescencia. Su aporte al teatro nacional es un orgullo para el arte nacional”.