La Masonería en Honduras
La masonería en Honduras cuenta con una arraigada tradición cuya génesis entronca con la de los países de su entorno, profundamente ligada a la disolución del Imperio Español en el siglo XIX.
Está constatada su presencia en la provincia de Comayagua desde 1811.
Una fecha especialmente significativa hay que marcarla en 1826, cuando el doctor Miguel Echarri se estableció en el país e inició a Dionisio de Herrera -quien fungía como Jefe Supremo de Estado-, y a un joven Francisco Morazán, entre otros distinguidos dirigentes.
A partir de éstos, también se conoce que fueron miembros de la hermandad el general José Trinidad Cabañas y el General e Ingeniero Terencio Sierra. De ello se se deduce sus sueños de construir un estado independiente y soberano.
La Gran Logia de la República de Honduras -distinta a la actual Gran Logia- e integrada en la Confederación Masónica Interamericana, se funda en 1897, en Tegucigalpa. Su primer taller levanta columnas bajo la divisa de Igualdad Nº1 y practica el Rito Escocés Antiguo y Aceptado.
La expansión de la masonería continúa generalizándose en la nación, hasta el punto de que a finales del siglo XIX aparece otra logia en la ciudad de San Pedro Sula, con el nombre de Eureka Nº 19. Mientras, en la costa norte, en la ciudad de La Ceiba, en 1905 emerge la logia Atlántida N.º 21, obra de José Teofile Leonard y Agustín Didier, que trabajó hasta 2005.
El 28 de abril de 1911 se reúnen en la capital hondureña un grupo de masones con el presidente de la nación, Francisco Bertrand Barahona, que también era hermano, con el fin de realizar una junta preparatoria para que levantar columnas la precitada logia Igualdad.
El templo para la venerable hermandad se inauguraría cuatro años después, en 1915. Tras arduos trabajos, el 24 de octubre de 1913 comienza la redacción del proyecto, seguidamente la adquisición de un terreno y después la construcción del edificio. En 1913, bajo la dirección del arquitecto Miguel Turcios Reina, el templo fue terminado e inaugurado. Dicho inmueble fue dañado severamente con el paso del Huracán Mitch, en 1998.
La actual Gran Logia de Honduras fue fundada el 16 de mayo de 1922, siendo el Gran Maestro el doctor Federico C. Canales. Los iniciadores fueron los maestros Francisco Bertrand Barahona, Maximiliano Sagastume, Mónico Zelaya, Miguel Oquelí Bustillo, Timoteo Miralda, Urbano Ugarte, Julián Baires, Miguel R. Durón, Federico C. Canales, Ramón Landa, Purificación Estrada, José Agapito Fiallos Villafranca, Feliciano J. Castro, Carlos Hartling, y, Silverio Laínez.
En el Museo de Historia Republicana Villa Roy .en la ciudad de Tegucigalpa, M.D.C. existe un apartado donde pueden apreciarse objetos y documentos francmasónicos hondureños.
Honduras en la actualidad cuenta con un nutrido grupo de logias activas y tiene el orgullo de contar entre sus columnas a notables prohombres, además de reseñados personajes históricos cuya aportación ha sido esencial en la creación de la patria.