La masonería condena el asalto al Capitolio
Gran Logia de Libres y Aceptados Masones de Wisconsin
Enero 10, 2021
Vida, Libertad, y la Búsqueda de la Felicidad
Hermanos míos,
El 6 de enero de 2021 fue el momento para que las ruedas de nuestro gobierno comenzaran a girar preparando el ritual que cada cuatro años reconoce la voluntad del pueblo y valida la elección de un líder para nuestro amado país. Este ritual ha sido un legado y parte de nuestra herencia durante más de 200 años. Desafortunadamente, en este día, un grupo de matones decidió forzar por sí mismo este proceso sagrado y evitar que estas ruedas giraran. Atacaron el santuario que alberga un lugar para que nuestros líderes electos lleven adelante los asuntos del País. Independientemente de nuestras convicciones políticas o creencias, como ciudadanos de los Estados Unidos y como masones justos y rectos, deberíamos sentirnos asqueados por las acciones despiadadas de estos criminales.
Nuestro país se basa en el humilde principio de que “nosotros, el pueblo” tenemos derecho a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad. Como masones, estamos encargados de promover estos principios para todas las personas y, como enseña el ritual, “… da a cada hombre lo que es justo sin distinción”. Hay mucho trabajo por hacer para asegurarnos de que todas las personas de este país tengan una participación igual en ese sueño, pero el trabajo de igualdad ante la ley y, en este caso, la transferencia pacífica del poder nunca debe detenerse ni ser interrumpida por la fuerza.
Estos criminales han expuesto a todos, en el pasado y el 6 de enero, a la retórica y acciones que promueven la desconfianza, la sospecha, la discriminación, la división y el odio, lo que en definitiva resultó en un asalto a la cuna de nuestro gobierno.
Los masones que creen en los principios del Amor Fraternal, Ayuda y Verdad no pueden pertenecer, con tranquilidad de conciencia, a ninguna organización que enseñe el odio y la supremacía de una persona sobre otra debido a su color, nacionalidad y creencias religiosas. Estas organizaciones están en conflicto directo con lo que nosotros, como masones, apreciamos. No puede ser posible ser miembro de una de estas organizaciones subversivas y seguir siendo masón.
Ustedes fueron preparados, primero, para ser masones en vuestros corazones. Yo no puedo perdonar que uno de nuestros Hermanos Masones mantenga una membresía en una de estas organizaciones. Si usted es miembro de una de ellas, le insto a que se aferre a sus enseñanzas masónicas y renuncie a ese grupo. De lo contrario, aceptaré con mucho gusto su renuncia a la Fraternidad Masónica.
Sincera y Fraternalmente,
M.·. R.·. Kenneth Gorgen
Gran Maestro de los Masones en Wisconsin